La creciente preocupación por el medio ambiente está impulsando a las empresas a adoptar prácticas de diseño más sostenibles en el embalaje de productos. Se están desarrollando soluciones innovadoras que utilizan papel y cartón reciclados, minimizando el uso de plásticos y otros materiales nocivos. Esta tendencia no solo responde a la demanda del consumidor por productos más ecológicos, sino que también ayuda a las empresas a cumplir con las normativas ambientales vigentes.